domingo, 27 de marzo de 2011

Amelie


Amélie (título original: Le fabuleux destin d'Amélie Poulain, "El fabuloso destino de Amélie Poulain") es una pelicula francesa del génerocomedia rimántica estrenada en 2001. El lema de la película era "Ella cambiará tu vida..." (En francés: "Elle va changer ta vie...").

Sin duda alguna Amelie no es una chica como las demás. Ha visto a sumadre morir en la plaza de Notre-Dame y a su padre dedicar todo su afecto a un gnomo de jardín. Creció y se convirtió en camarera en un bar de Montmartre donde:
  • Suzanne, la dueña, antigua artista de la hípica artistica, que cojea un poco (ya que se le cayó su propio caballo encima) pero nunca derrama nada, a la que le gusta ver a los atletas que lloran por desilusión y no le gusta que un hombre sea humillado en presencia de su hijo.
  • Georgette, la vendedora de tabaco hipocondríaca, la cual odia la frase “el fruto de su vientre”.
  • Gina, camarera como Amélie, cuya abuela era sanadora, y a quien le gusta hacer crujir los huesos.
  • Hipólito, un escritor fracasado, a quien le gusta ver toreros corneados en televisión.
  • Joseph, el amante rechazado de Gina, quien se pasa espiándola todo el día y a quien sólo le gusta explotar el papel de burbujas.
  • Philomène, azafata de vuelo, a quien le gusta el ruido producido por el tazón del gato en el azulejo, al cual le gusta oír historias para niños.

La vida de Amelie es sencilla: le gusta tirar piedras al Sena, observar a la gente y dejar volar su imaginación. De repente, a sus 22 años, Amelie descubre su objetivo en la vida: arreglar la vida de los demás. Inventa toda clase de estrategias para intervenir, sin que se den cuenta, en la existencia de varias personas de su entorno. Entre ellas está su portera, que pasa los días bebiendo vino de Oporto; Georgette, una estanquera hipocondríaca; o "el hombre de cristal", un vecino que sólo ve el mundo a través de la reproducción de un cuadro de Renoir. La misión de Amelie se ve trastocada por la llegada de un chico extraño y muy peculiar: Nino Quincampoix. Tiene dos trabajos: de fantasma en un túnel del terror y otro en un sex-shop. Colecciona las fotos abandonadas en los fotomatones y busca desesperadamente identificar al hombre que aparece en ellas una y otra vez. Sin embargo, esta búsqueda se ve interrumpida por su encuentro con Amelie.

Una de las películas francesas más taquilleras de todos los tiempos (más de 30 millones de espectadores en el mundo), Amélie marcó un fenómeno muy poco usual en su fecha, desbancar a las siempre taquilleras películas estadounidenses en Francia y lograr una gran repercusión fuera de su país, en EE. UU., Europa, América Latina y Asia.


A pesar de ser descrita por muchos como un "cuento para adultos" en esta película se pueden encontrar pequeñas pinceladas sobre la naturaleza humana. El principal y más evidente es el hecho de ver con romanticismo y nostalgia la infancia. La inocencia y a la vez la naturaleza traviesa que se le atribuye a los niños hace que Amelie pase de ser un personaje más a uno con mucho juego. Por supuesto no nos podemos olvidar del simbolismo de encontrarse en una caja los recuerdos de infancia de un hombre a quien, encontrarse con esta gracias a Amelie, le supone un cambio en su vida y una recapacitación de ella.

Titulo: Amelie
Dirección: Jean-Pierra-Jeunet
Guion: Jean-Pierra Jeunet
Musica: Yann Tiersen



sábado, 12 de marzo de 2011

Propaganda política.

La propaganda consiste en el lanzamiento de una serie de mensajes que busca influir en el sistema de valores del ciudadano y en su conducta.
 La mercadotecnia política, al aprovechar la psicología de las masas para posicionar líderes, ha resultado vital para el acceso al poder. En condiciones éticas, el líder debería responder de manera íntegra a las expectativas populares de progreso y justicia social. Sin embargo, los líderes políticos actuales, tienden más a gastar en promoción personal a través de mensajes que “posicionan” su imagen, que en acciones de desarrollo social, que tal vez contribuirían más a una mejor percepción de la opinión pública.
Campaña de presentación, posicionamiento y reforzamiento o Consultores y Marketing Político impulsa una campaña sin importar la etapa en la que se desenvuelve para dar fuerza al candidato frente a la oposición y lograr en el público conocimiento de su imagen así como de sus propuestas. El objetivo es transmitir la convicción de que él es la mejor opción y llevar al electorado a votar a su favor.
El consultor en este caso, pone en primer lugar el posicionamiento de la imagen y luego las propuestas, es decir, el privilegio de la propaganda. Se espera que el electorado tenga una percepción que muchas veces no corresponde a la realidad del líder promovido. Las propuestas políticas muchas veces solamente se quedan en promesas y no en verdaderos actos de ejecución política y pudiera llegarse a pensar que entonces existe una abundancia de líderes narcisistas sociopáticos o malignos en esta actividad.
El mismo Adolfo Hitler (1922: 64) en Mi Lucha, dice acerca de la propaganda:
“La propaganda es un medio y debe ser considerada desde el punto de vista del objetivo al cual sirve. Su forma, en consecuencia, tiene que estar acondicionada de modo que apoye al objetivo perseguido”.
La propaganda en la política pudiera ser definida como la actividad que utiliza herramientas psicológicas para hacer algo creíble sin importar si es correcto, aprovechando determinada simbología para influenciar a la masa. La propaganda en muchas ocasiones se acompaña de la fuerza; por medio de ella, se somete a la masa a determinadas creencias.
El uso de la propaganda para posicionar a un líder político es hoy en día frecuente; el líder trata de “venderse” al votante, incluso mal informando o desinformando, al utilizar excesivamente los medios de comunicación a su alcance. Con la propaganda, se intenta presentar al público una determinada imagen del líder que deberá ubicarle dentro de su imaginario de manera concordante a sus anhelos, tanto inmediatos como más sentidos.

martes, 1 de marzo de 2011

El marketing político que llego para quedarse.

Las campañas políticas modernas se caracterizan por apoyarse en los medios de comunicación, lo cual les da iniciativa, frecuencia, cobertura, donde ubicuidad a los candidatos y posibilidades inmensas de promoción y de recordación. Si antes los candidatos lanzaban mensajes como perdigones, hoy las armas deben tener exactitud milimétrica y penetrar en la mente de los lectores.

En estas sociedades democráticas solo hay dos tipos de campañas: las exitosas y las fracasadas.

Las campañas inteligentes son ejercicios proselitistas sofisticados que se sustentan en la información y el conocimiento, capaces de adoptarse con rapidez a los cambios coyunturales y que utiliza las nuevas tecnologías para la comunicación y la persuasión del electorado. Las campañas poco inteligentes son reactivas, caóticas, desinformadas y tradicionales.



A finales del 2005, en la elección interna del PAN, es elegido candidato a la presidencia de la República luego de derrotar con un amplio margen al Ex Secretario de Gobernación Santiago Creel, y el Ex Gobernador de Jalisco, Alberto Cárdenas Jiménez .
Finalmente aceptó la nominación de su partido el 4 de diciembre de 2005 y comenzó su campaña en Enero de 2006.

Se dice que el éxito que tuvo su campaña electoral se debió en gran parte al español que la condujo: Antonio Solá, vinculado al Partido Popular español en tiempos de José María Aznar.
El mérito de Solá radica en haber sido capaz de reforzar la imagen de su candidato mientras minaba la de su rival, López Obrador, comparándolo con el presidente venezolano Hugo Chávez y acusándolo de radical.

La campaña de Calderón se apoyó en tres pilares: moderación, modernidad y transparencia económica. Los sectores bases de su estrategia política fueron los jóvenes, mujeres, medio ambiente o Internet. Y en cuanto al dinero, se presentó como un antídoto para la corrupción.
Asi también señaló en su campaña su oposición al aborto, la eutanasia, a los métodos anticonceptivos y al matrimonio homosexual. Propuso entre otras cosas, policías fiscales, mejoramiento de la recaudación y un amplio programa de empleo, siendo éste su principal punto de apoyo.

Así pues entre debates y gran expectativa, la campaña electoral termina dos semanas antes de la elección, las votaciones llegaron y por una mínima diferencia, el 2 de julio del año 2006 Felipe Calderón resulta vencedor para ocupar el cargo de Presidente de la República
Ante tal situación, el candidato del PRD Andrés Manuel López Obrador declaró que se había producido un fraude electoral y exigió el recuento de los votos movilizando en la Ciudad de México a miles de manifestantes en su apoyo, bloqueando los accesos a la avenida Paseo de la Reforma (una de las más importantes de la ciudad) y al centro de la ciudad por más de un mes.

Este resultado fue turnado al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, finalmente el 5 de septiembre de 2006 validó las elecciones, declarando así a Felipe Calderón como Presidente Electo de México.


El 7 de septiembre fue emitido el Bando Solemne por parte de la Cámara de Diputados con el que se anuncia que Felipe Calderón es nombrado Presidente Electo y el 1 de diciembre toma protesta como Presidente de la Nación para el período 2006-2012.